martes, 24 de junio de 2014

Helado de yogur griego sin heladera, "Jroña que jroña"




Para mi, uno de los paisajes más bonitos del verano es el de las heladerías artesanales repletas de preciosos helados multicolores que parecen pequeños museos comestibles del sabor del pecado. Porque para mi un verano sin helado es como un invierno sin mantas, o sin sopa, no lo concibo. 

Pero no me gusta cualquier helado, no me gustan esas aberraciones industriales que solo saben a nata, a colorante y Dios sabe que historias. Me gustan los helados, hechos con cariño y sobre todo me gusta, que cuando compro un helado de fresa sepa a fresa y cuando lo compro de café, a café, y a ninguna otra cosa. Y si hay dos sabores irrestibles para mi, esos son el de yogur y el de after-eight. De hecho tengo un ritual  para probar la calidad de una heladería. La primera vez siempre pido uno de estos dos sabores, o los dos, ya que los conozco a la perfección y he probado infinidad de ellos. Si la heladería aprueba, y me gusta el helado, entonces vuelvo pero si no lo hacen no lo hago. Me he encontrado con helados after-eight pésimos, verde fosforito y con un sabor muy poco sutil más parecido a comer pasta dentífrica que menta. El helado de yogur, por otro lado, suele tener muchas veces más parecido al helado de queso o al de nata del que a mi me gustaría. Como he dicho cuando pido un sabor es ese sabor y no otro. 

Una vez encontrada la heladería perfecta, el siguiente problema suele ser mantener el vicio, ya que, baratos lo que se dice baratos, no suelen ser. Otra cosa que tampoco suele ser por norma general un helado es ligero. Para paliar estos dos defectos una de las soluciones más apañadas es hacerlo en casa. De esta manera rebajamos el coste y también podemos disminuir la cantidad de azucares y de grasas. Además hacer el helados en casa es muy sencillo, incluso sin heladera (yo no la tengo). Sólo hace falta un poco de paciencia y unas cucharadas de cariño. Y una de las mejores noticias para mi, es que el de yogur es uno de los más sencillos de hacer. De hecho, cuando descubrí la receta y la hice fue para mi, literalmente, como encontrar la gallina de los huevos de oro.

Este helado lo suelo hacer de dos maneras. Una es utilizando yogur griego, que tiene más cantidad de grasa que un yogur normal y por tanto ayuda a que el helado quede más cremoso. La otra manera, es con yogur normal desuerado. Es decir yogur al que se le extrae el suero, o el agua, con ayuda de una gasa o paño. De esta manera se consigue también un helado más cremoso ya que la excesiva cantidad y tamaño de cristales de agua es la principal causa de que el helado no quede cremoso y suave.

Otro de los ingredientes que ayuda a que el helado quede más cremoso es el azúcar, en concreto el azúcar invertido. Yo prefiero utilizar la menor cantidad posible de azúcar es por ello que normalmente lo suelo sustituir por miel.

También el alcohol, por su bajo punto de congelamiento ayuda que el helado quede más suave. Aunque este es un ingrediente totalmente opcional.



Compartiré la receta del helado de menta con yogur desuerado, si he dicho bien, de menta y yogur, mi paraiso terrenal, más adelante, el de hoy es el de yogur griego. Un helado refrescante y delicioso más perfecto aún acompañado de fruta congelada o natural. Espero que os guste tanto como a mi.

Como curiosidad, por que nunca esta de más aprender algo inútil, me gustaría compartir uno de los secretos mejor guardados de danone que he descubierto documentandome para esta entrada. Yo también aprendí griego hace ya bastante tiempo, y también le hice la pregunta de rigor a mi profesora. ¿Qué significa "Jroña que jroña"?. Ella no supo responder al momento ya que la abuela del anuncio de yogur hablaba en griego moderno muy distinto al griego clásico y muy elemental que aprendíamos entonces. Al de unos días la profesora, ya documentada, vino y nos dijo que significaba algo así como "años y años". Pero la anciana decía mucho más que eso y ahora gracias a pompilo, otro profesor de griego, el misterio está resuelto. La abuela razonablemente enfadada decía esto:

"Χρόνια και χρόνια μας πήραν τα αρχαία μας. Μετά μας πήραν τις Ολυμπιάδες μας. Τώρα, θέλουν να πάρουν και το γιαουρτι μας. Πλαμ.
[Durante] años y años nos quitaron nuestras antigüedades. Luego nos quitaron también las Olimpiadas. Ahora, quieren quitarnos también nuestro yogur."




{HELADO DE YOGUR GRIEGO SIN HELADERA}

INGREDIENTES
  • 8 yogures griegos sin azúcar (1 kg)*
  • 100-150 gr de azúcar (o la cantidad equivalente de azúcar invertido u otro edulcorante)
  • 2-3 cuchardas de licor, ron en mi caso. (Opcional)
  • 1 tbsp de vainilla
  • 1/4 cup de miel (opcional)


PREPARACIÓN

1. Mezcla todos los ingredientes en un bol. Bate con las varillas durante unos minutos hasta que el azúcar se haya disuelto y todos los ingredientes estén bien integrados . Hacerlo con las varillas ayuda a añadir más aire a la mezcla, lo que a su vez, ayuda a que el helado quede más cremoso.



2. Vierte la mezcla en un recipiente, preferiblemente de metal y cúbrelo con plástico transparente. Mete el recipiente en el congelador. Saca el helado cada 30 minutos y bate bien hasta romper los critales grandes que se hayan formado. Repite el proceso unas 3-4 veces. Este paso es muy importante.


3. Saca el helado 5 minutos antes de servir para una textura más cremosa.


NOTAS

*En caso de que utilices yogures griegos con azúcar no hará falta que añadas más azúcar.

*La cantidad de azúcar es orientativa. Lo mejor es probar la mezcla y ajustar el dulzor a gusto de cada uno. Es importante tener en cuenta que los sabores son menos intensos en la comida congelada y que el dulzor del helado congelado será ligeramente inferior al del mismo helado templado.

*Puedes sustituir todo el azúcar o parte del azúcar por miel, por leche condesada, por sirope, glucosa o el endulzante de tu elección.


1. Si el helado te queda más solido de lo que deseas, o al de unos días en el congelador se endurece demasiado, mételo, cortado en pequeños bloques en el procesador de alimentos y bate hasta formar una crema. Puedes servirlo así o volver a meterlo al congelador.

2. Puedes añadir sabor al helado agregando a la mezcla puré de fruta o mermelada. También puedes hacerlo de chocolate con cacao puro en polvo, o añadir esencias o aromas distintos al de la vainilla como canela, citricos, o menta.

FUENTES
Directo al paladar, helado de yogur
Invitado de invierno, helado de yogur cremoso
DeniKatessen, helado de yogur



jueves, 19 de junio de 2014

Helado de plátano hipersaludable de Gwyneth Paltrow




Hasta hace muy poco pensaba que Gwyneth Paltrow solo era actriz, guapa y rica. Pero resulta que también cocina y además escribe libros sobre ello. Libros que mucha gente critica e incluso odia porque, según dicen, en ellos la actriz fomenta su trastorno de alimentación y su obsesión patológica por la comida macrobiótica e hipersaludable.

Personalmente intento odiar lo menos posible, porque lo considero una perdida tiempo, y no pienso perder un minuto de mi vida preocupandome de si Gwyneth Paltrow come bien mal o regular. Además no he leído sus libros y por tanto carezco de información suficiente para opinar al respecto.


De lo que si puedo opinar es de su helado de plátano con almendras dulces y saladas. Esta receta aparece en el libro "It´s all good" de la actriz y es casi como un milagro. La encontré mientras buscaba una receta de helado ligera en la página Henry Happened y aunque no soy vegana ni sigo dieta alguna y cuando puedo me hincho a comer gelato italiano, para mi esta es un receta digna de enmarcar por muchas y diversas razones. 

La primera es que es una excelente manera de aprovechar los plátanos maduros. La segunda, es que es el helado más fácil de hacer de la historia. La tercera, es su bajo coste económico. La cuarta, es que es también uno de los helados más saludables de la historia. Y la última, y no menos importante, es que esta muy bueno, cremoso, suave, dulce y salado en la medida justa. Y aunque a punto estuve de de no añadir sal a las almendras me alegro mucho de haberlo hecho porque contrasta y combina muy bien con el dulzor del plátano.

Al investigar sobre esta receta he descubierto el maravilloso mundo de los helados con fruta congelada. Estos helados, los más rápidos y naturales, se pueden hacer, además del plátano, con cualquier otra fruta previamente congelada, un poco de leche, yogur o similares y el endulzante de nuestra elección. Su dificultad es mínima ya que la única habilidad requerida es pulsar adecuadamente el botón de la batidora. La pega, y es la única, es que se derriten más rápidamente que los helados convencionales y deben hacerse justo en el momento en que vayamos a comerlos. Sin embargo, siempre se pueden meter en el congelador para que se endurezcan un poco y a mi me gustan incluso más tras congelarlos completamente y triturarlos de nuevo en la batidora. En canal youtube de Jamie Oliver podeis ver al concinero preparar un helado muy interesante con fresa, yogur griego y pimm´s. El lo describe como una trampa brillante, y yo estoy de acuerdo. 


El helado de Gwyneth Paltrow



{RECETA DE HELADO DE PLÁTANO HIPERSALUDABLE}

INGREDIENTES

  • 4 plátanos (o bananas) maduros, pelados y troceados
  • 1/4 cup de almendras tostadas, finamente troceadas
  • 2 tbsp más 2 tsp de jarabe de arce, dividido
  • 1/2 tsp de sal marina
  • 1/2 cup de leche de almendra sin azúcar (en mi caso, con azúcar)
  • 1 tsp de extracto de vainilla

PREPARACIÓN


1. Pela y trocea los plátanos y coloca los discos sobre una bandeja cubierta de papel de horno de uno en uno. Mete al congelador al menos 3 horas. (Pasadas las 3 horas, cuando los plátanos estén congelados, y si no los vas a usar al momento mételos en una bolsa de congelado y guárdalos en ella hasta el momento de usarlos)


2. Mezcla en un bol las almendras, 2 tsp del jarabe y la sal.


3. Tritura los plátanos congelados, la leche, la vainilla y el resto del sirope en un procesador de alimentos hasta conseguir la textura de un helado espeso y homogéneo. Procura no batir en exceso ya que el helado se podría tornar demasiado líquido. 



4. Sirve con las almendras saladas.


NOTAS

1. La leche de almendras se puede sustituir por lacteos como la leche de vaca, yogur, o queso. Yo lo he hecho con queso mascarpone y la verdad es que queda muy bien aunque deje de ser un helado hipersaludable. Aquí la foto:



2. El jarabe de arce se puede sustituir por miel, sirope de agave, melaza o cualquier otro enduzante.

3. El helado que sobre se puede volver a meter al congelador y aunque le cambiará la textura un poco al sacarlo de nuevo mantendrá con bastante dignidad su cremosidad después de reposar unos minutos fuera de el congelador. Tambien se puede cortar en trozos como cubitos de hielo y triturarlo en el procesador.

4. Añade cacao puro en polvo y obtendrás el helado de chocolate más fácil y rápido del mundo.

5. Si no te gustan los plátanos, no tienes o prefieres otra fruta sientete libre para experimentar con cualquier otra fruta congelada.


miércoles, 18 de junio de 2014

Fideos crujientes con salsa dulce de jengibre y cebolleta



Esta receta fue fruto de un error. Mi intención era hacer los famosos "Soba Noodles with Sweet Ginger Scallion Sauce" de Simply Green. Una de las recetas de fideos más difundida en pinterest y una de las cumbres del "food porn". 

Mi afortunado error, o errores porque fueron varios, fue hacer la receta con fideos chinos normales en lugar de los fideos soba de trigo sarraceno. Mi segundo error fue añadir toda la salsa de golpe, sin comprobar si era necesaria todo ella, lo que dio como resultado unos fideos encharcados y acuosos que aunque estaban buenos no eran, ni mucho menos, como los deliciosos fideos que se ven en la foto de Simply Green. 



Entonces tuve una tercera idea de bombero. Pensé  que sería una buena idea tostarlos en la sartén para secarlos un poco. En ello estaba cuando observe cómo los fideos comenzaban a dorarse y ordenarse en forma de una gran tortita de lo más apetecible. Después probé un trozo y me enamoré. Estaba buenísima.

La salsa es exótica, dulce, fresca y muy aromática. Tiene una combinación de sabores perfecta y junto a los fideos y la capa crujiente de fideo tostado crea un plato escandalosamente bueno.


{RECETA DE FIDEOS CRUJIENTES CON SALSA DULCE DE JENGIBRE Y CEBOLLETA}


INGREDIENTES (Para 4-5 personas)
  • Un paquete de fideos soba (fideos chinos en su defecto)
  • Sal y pimienta, al gusto
  • 2 Tbsp de semillas de sésamo tostado
Para la salsa dulce de jengibre y cebolleta
  • 1 ½ cup de tallos de cebolleta finamente picada. 
  • 2 tbsp de jengibre fresco picado.
  • ¼ cup de perejil (o cilantro) y cebollino picado.  
  • 2-3 tbsp de Aceite de sésamo (o aceite suave).
  • 2 tsp de aceite de chili o picante
  • 1Tbsp de salsa de soja
  • 2 Tbsp de vinagre de arroz (o vino blanco)
  • 2 Tbsp de miel
  • Salt, al gusto
  • 1 tsp (aprox.)de pimienta negra


PREPARACIÓN

1. Mezcla todos los ingredientes para la salsa en un bol. Prueba y sazona al gusto. Deja que repose 10-15 minutos para que los sabores se integren y enriquezcan.





2. Cuece los fideos siguiendo las instrucciones del fabricante. Escurrelos y echalos a un bol grande. Reserva 1/4 de taza de el agua de cocción.


3. Mezcla el agua de cocción con la salsa y vierte la misma sobre los fideos. Añade también las semillas de sésamo y mezcla bien. Prueba una vez más para comprobar que este bien sazonado.


4. Calienta una sartén pequeña con un chorrito de aceite a medio fuego. Cuando esté caliente cubre el fondo con el equivalente a un plato de fideos. Cuando la parte inferior comience a tostarse da la vuelta a la "tortita" y cocina por el otro lado. Sigue el mismo proceso para las demás raciones.


5. Sirve caliente o frio, acompañado de huevo, verduras o carne.


NOTAS

1. La receta original añade pepino cortado en juliana y lima al final del paso tres. Yo no lo añadí porque no tenía ninguno de ellos pero podría ser una buena idea.




martes, 17 de junio de 2014

Leche, cacao, avellanas y ¿azúcar?. Crema de cacao y avellanas fácil.




Aunque me gustan las dos horrores, nunca me ha costado mucho elegir entre la Nocilla y la Nutella.


Yo me quedo con la italiana por su sabor mucho más intenso a avellana, por su textura más cremosa y por su cacao delicado y perfecto.

Inspirada en la crema tradicional italiana llamada pasta gianduja, la nutella nació en Italia debido a la escasez de cacao que se produjo al  finalizar la Segunda Guerra Mundial. Fue Pietro Ferrero quien ideo la primera receta que más tarde fue modificada por la segunda generación de pasteleros Ferrero y se convirtió en el manjar untable que conocemos hoy como Nutella.

Inspirada en la crema Italiana, la Nocilla española nació más tarde, en 1967 y fue creada por el grupo Starlux rebajando la cantidad de avellanas.

Yo por mi parte, llevaba tiempo intentando crear una versión casera con menos azúcar de la crema de cacao y avellanas. Lo intenté con leche y miel, con sirope de ágave, con stevia y con edulcorantes. Pero ninguna de ellas me satisfizo lo suficiente como para compartirla. Aunque estaban buenas, muy buenas incluso, les faltaba esa última chispa que le da el azúcar al bocadillo favorito de muchos niños.


Ahora ya puedo respirar tranquila. Esta receta que comparto no solo es fácil, más sana y menos engordante que las cremas de cacao industriales sino que tampoco tiene mucho que envidiar a ninguna de ellas.

Mi hermana me la pide constantemente y seguro que si la haces a ti también habrá quien te implore un poco más de ella.



{RECETA DE CREMA DE CACAO Y AVELLANAS CASERA}

INGREDIENTES
  • 200gr de avellanas
  • 1-2 tbsp de aceite suave 
  • 3-4 tbs de cacao puro en polvo
  • 2 tbsp de leche en polvo desnatada
  • 1/4 cup de miel
  • 1-2 tsp golden syrup (opcional)
  • 2 tsp extracto de vainilla
  • Una pizca de sal
  • Leche, al gusto



PREPARACIÓN

1. Triturar las avellanas con un poco aceite




2. Añade el cacao, la miel, la leche en polvo, el golden syrup, el extracto y la sal. Continua batiendo hasta que adquiera la consistencia deseada. Si crees que la mezcla ha quedado demasiado espesa añade leche poco a poco. (Ten en cuenta que la crema espesará un poco más al enfriarse)


3. Mete en un tarro de cristal y conserva en la nevera.



Fuentes: Wikipedia, Nocilla.



NOTAS

1. Puedes sustituir la miel y el golden syrup por azúcar moreno o blanco, melaza, sirope de ágave u otros edulcorantes. Si lo haces es propable que la consistencia de la crema cambie.

2. El golden syrup se puede encontrar en grandes superficies, en  tiendas especializadas con productos anglosajones o en internet. Para hacer una versión casera pincha aquí o aquí.

3.  El cacao en polvo no es sustituible por preparados de chocolate en polvo azucarados para beber, del estilo de Cola Cao o Nesquick. En España lo comercializan Valor y Pedro Mayo, entre otros, y se puede encontrar en prácticamente todos los supermercados. Yo utilizo el de la marca valor.  Para saber más: El rincón de Bea







viernes, 13 de junio de 2014

Ensalada para picnic de zanahoria, naranja y comino de Gordon Ramsay




Las zanahorias suelen ser unas meras invitadas en nuestros platos. Alegran y endulzan una infinidad de ellos sin que nunca nadie las aplauda ni las alabe. Las pobres están subestimadas. 

Segun David Leboitz, no es así en Francia, donde afirma que la ensalada de zanahoria rallada,  carottes râpées, es uno de los platos nacionales y un imprescindible en la carta de muchos bistrós y cafés. Incluso se vende al kilo en charcuterías y envasado para llevar en supermercados. 

La versión parisina de este plato es bastante sencilla y casi se limita a una pila de zanahoria rallada ligeramente aliñada con una mezcla de limón, aceite, azúcar, sal y pimienta. Y la verdad, es que la dulce y humilde zanahoria no necesita mucho más para lucir sus encantos.

Sin embargo, la versión que Gordon Ramsay propone en su programa, y libro, "Gordon Ramsay's Home Cooking " es mi favorita. Su ensalada es un poco más elaborada, aromática y contundente pero sin dejar la esencia fresca y sencilla del  plato de lado. Todos los sabores combinan a la perfección. Es dulce, ácida, amarga, aromática, crujiente y suave. Están todos los ingredientes que deberían estar y no sobra ninguno. 

Es un plato barato, fácil y sano. Perfecto para un picnic porque se puede preparar con antelación y aguantará muy bien el viaje y, por si fuera poco, esta buenísimo. 

Creo que esta receta es una de las mejores razones que se pueden dar para empezar a valorar un poco más a esta leal hortaliza con tantas posibilidades.




{RECETA DE ENSALADA DE ZANAHORIA, NARANJA Y COMINO}

INGREDIENTES
  • 5 zanahorias grandes
  • Ralladura y zumo de una naranja
  • 75 gr de pipas de calabaza
  • Pipas de girasol, al gusto
  • Semillas de amapola, al gusto (opcional)
  • 1 y 1/2 tsp de semillas de comino, tostadas
  • Una pizca de cayena seca (opcional)
  • 1 tbsp de mostaza de Dijon (o normal)
  • 1 tbsp de miel
  • 1 tbsp de vinagre de vino blanco (en mi caso de arroz)
  • 3-4 tbso de aceite de oliva
  • Hojas de cilantro fresco, aprox. 2 tbsp (en mi caso perejil)
  • Hojas de menta fresca, aprox 2 tbsp
  • Cebollino (opcional)
  • Sal marina

PREPARACIÓN

1. Lava, pela y ralla la zanahoria.


2. Mezcla en un bol grande la zanahoria, la ralladura y zumo de naranja las pipas y las semillas.


3. En un mortero, muele las semillas de comino, la cayena y la sal


4. Añade la mostaza , la miel, el vinagre, el aceite, las hojas de cilantro y las hojas de menta. Mezcla todo bien con una cuchara y echa la salsa al bol con la zanahoria. Mezcla de nuevo para que la vinagreta se reparta bien y sirve.



NOTAS

1. Todos los ingredientes opcionales no forman parte de la receta original de Gordon Ramsay. Son ingredientes que he adaptado yo.

2. La ensalada se conservará en buen estado en la nevera 2 días.

3. Para un mejor resultado, ralla la zanahoria lo más finente posible.